Es un fenómeno que se presenta cuando uno o varios materiales inflamables son consumidos en forma incontrolada por el fuego, generando pérdidas en vidas o/y bienes. Para que se produzca fuego es necesario que existan tres elementos: material combustible, oxígeno y una fuente de calor.
¿Cómo nos preparamos?
- Elaboremos juntos el plan familiar de emergencias. Es sencillo y puede salvar la vida de nuestra familia.
- Con los miembros de la familia preparemos el maletín para emergencias, con alimentos no perecederos, radio, foco, documentos personales, medicinas y protectores para cubrir la nariz.
- Organicemos a la familia para planear como actuar en caso de incendio.
- Mantengamos las salidas y escaleras libres de obstáculos.
- Tan pronto terminemos de utilizar cualquier aparato eléctrico, asegurémonos que quede apagado.
- Mantengamos en perfectas condiciones el sistema eléctrico del inmueble.
- Mantengamos fuera del alcance de los niños velas, fósforos, encendedores y toda clase de material inflamable.
- No almacenemos combustibles o sustancias inflamables en la casa o en el garaje.
Respondamos a tiempo
- Tomemos medidas para controlar el incendio usando sábanas, cobijas, tierra o Agua.
- Preparémonos para una posible evacuación.
- Ayudemos a los niños, ancianos, minusválidos y enfermos que estén con nosotros.
- Sigamos las indicaciones del personal encargado de hacer la evacuación.
- No busquemos refugio en lugares donde podamos quedar atrapados, busquemos siempre salidas.
- Si no podemos salir rápidamente, protejámonos la cara y las vías respiratorias con pedazos de tela mojada y también mojemos la ropa. Si nos encontramos atrapado en un piso alto, colguemos o saquemos algún artículo para llamar la atención.
- Mantengamos en perfectas condiciones el sistema eléctrico del inmueble.
- Mantengamos fuera del alcance de los niños velas, fósforos, encendedores y toda clase de material inflamable.
- No almacenemos combustibles o sustancias inflamables en la casa o en el garaje.
- Si la casa está llena de humo, agachémonos y busquemos una salida.
- Antes de abrir una puerta, debemos palparla con el dorso de la mano. Si está caliente, no la abramos y busquemos otro camino.
- Aunque la puerta no esté caliente, abrámosla con mucho cuidado, con el hombro contra la puerta y empujándola lentamente. Si al hacerlo entra humo y calor, cerrémosla inmediatamente y busquemos otro camino.
- Permanezcamos en un lugar seguro y estemos atentos al informe oficial de la CNE donde indique que todo ha vuelto a la normalidad
Después:
- No regresemos a la vivienda hasta que las condiciones de seguridad sean óptimas y nos lo recomienden las autoridades correspondientes.
- El vecindario debe verificar de manera organizada el estado de las viviendas.
- Hagamos que un técnico revise las instalaciones eléctricas y de gas, antes de conectarlas nuevamente.
- No volvamos a congelar los alimentos que se hayan descongelado.